#HistoriasCortasTCE No. 39:
“Nuevo Escenario-Parte 2”.
Viene de: #HistoriasCortasTCE
No. 39: “Nuevo Escenario-Parte 1”.
Noche en la ciudad. Apartamento de
Mercedes y César.
Mercedes camina de un lado a otro en la
sala de su apartamento. Los nervios que
la invadían la estaban sumergiendo en una compulsión que despertaban sus más
profundos fantasmas. Como pidiendo
auxilio ante el caldero interno que sentía, Mercedes sola repetía esa frase de
un lado a otro de su casa.
-Mercedes: ¡Llega, César,
por favor, llega! ¡Llega, César, por
favor, llega!
Los ruidos de las llaves de César y el mover de la cerradura de la
puerta principal le indicaron a Mercedes que sus fantasmas serían
aplacados. Al ver a César, Mercedes se
lanzó hacia el hombre, quien era llenado de besos por parte de la hermosa mujer.
-Mercedes: ¡Amor,
llegaste, pensé que nunca llegarías; no vuelvas a dejarme así!
-César: No te he dejado,
de dónde sacas semejante idea.
-Mercedes: SShhh, No
importa, ya estás aquí y yo quiero estar contigo.
César recibió un adelanto de su luna de
miel.
***
César se sienta en un sofá de su sala y pensativo, en
medio de la oscuridad, pues aún no amanecía, parecía abstraído y triste;
Mercedes se levanta vestida con la camisa que llevaba César horas antes y se
acerca a él.
-Mercedes: ¿Por qué te fuiste de mi
lado para estar tan solito, en qué estás pensando?
-César: Nada, Mercedes, quería estar
solo un momento.
-Mercedes: No es bueno estar solo,
sobre todo cuando ya nunca más lo vas a estar.
El sábado nos casamos y de ahí vendrán más años juntos, adicionales a
los cinco que llevamos.
-César: ¿Mercedes, por qué me amas?
-Mercedes: Si dudas que te amo, sólo
tienes que ver mis ojos, César. Observa
mi mirada, es como la de Laura.
-César: ¡Cómo así!, ¿qué quieres
decirme con eso?
-Mercedes: Sencillo, yo tengo la
mirada de una mujer enamorada, como la tiene Laura hacia su novio Daniel. Cuando una mujer se enamora, pueden haber
miles de miradas hacia ella; pero sólo tiene ojos para el hombre que ama. Incluso, puede haber muchos hombres que la
admiren, se deslumbren por ella; pero
ella sólo quiere la atención del hombre que ama, los demás se pueden quedar
contemplando. Sólo pueden hacer eso:
Contemplar, porque una ya tiene dueño, no le interesa más nadie. Cuando me mires, acuérdate que no miro a más
nadie, porque te amo. Como Laura, que no
mira a más nadie, porque ya tiene a Daniel.
Lo abraza y César queda pensativo.
Melissa
G.
Continúa
en la siguiente #HistoriasCortasTCE No.39-Parte 3......
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